lunes, 20 de diciembre de 2010

resumen

Pienso que el Blog en la sala de clases puede ser una herramienta extraordinariamente útil, por eso he decidido darle la vuelta a este tema para visualizarlo desde distintas aristas. Sería muy importante para mí que ustedes pudieran también aportarme algunas ideas. Recuero que cuando era niño y estaba en octavo básico, mi profesora de Castellano, Sor María Domínica, nos dio como trabajo escribir un diario de vida, una especie de bitácora de acontecimientos, una suerte de blog de mi propia prehistoria. Tengo claro que un par de veces he repetido esa experiencia con mis alumnos. Más reciente aún. Los chicos de 8º, primero y segundo medio, permanentemente reciben de mi parte instrucciones para leer, comentar, analizar, criticar y producir textos expositivos, argumentativos, periodísticos, artículos de opinión, etc. Ahora bien. Si esa práctica de creación de lenguaje hay que hacerla para que los alumnos adquieran y desarrollen las habilidades y competencias que a ellas van asociadas, me he preguntado ¿por qué no ejercitarlas a través de los blogs? ¿Por qué no hacer que mis alumnos escriban y comenten blogs propios y ajenos? Sería una manera potente, significativa, dinámica y moderna de ejercer el derecho a opinar, de producir información y de analizarla críticamente. Por eso lo voy a hacer. Y pronto. Pero sigo dándole la vuelta para buscar otros usos. ¿Servirá para tratar temas transversales con los padres de mis alumnos? ¡seguro que sí! ¿Servirá para formar comunidades integradoras en torno a varias asignaturas y estamentos? ¡Probémoslo! Yo sé que varios lo están haciendo. Yo no lo he hecho nunca, nadie me ha enseñando a hacerlo, por eso les propongo que nos demos ideas, que las compartamos y que a medida que se vayan probando podamos fundar la Pedablogía y luego decir, igual que Bob el Constructor, ¡podemos hacerlo!

Estudiante Jorge guillen Carhuacusma

crucigrana

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